11/01/2010

Se les termina el turno.

Vuelvo, a más de un año de mi última entrada, quizás (y enhorabuena) más politizado.
Digo quizás, por que la única regla de este blog es que no las haya.
Digo enhorabuena porque no encontré un sinónimo menos gallego y porque por suerte estamos volviendo a entender que:
La política no son los políticos (o, si lo prefieren, políticos somos todos)
La política es nuestra legítima herramienta para debatir ideas, y sobre todo generar los cambios sociales que deseamos.

Esta arrítmica introducción para llegar a un pequeño pensamiento que me viene provocando.

Veo a las generaciones que dejaron a este país como está, desde cierta distancia intelectual, frivolidad, y cinismo, tratando a la generación a la que pertenezco (sub 30) de ingenuos o confundidos o incluso de románticos idealistas (acaso es un insulto?).

Y yo les digo, ya pasó su turno, ya hicieron cagadas. Ya defendieron la dictadura algunos, ya se quedaron comoditos en casa en los 90 otros.
No será hora de que nos escuchen a nosotros? No nos toca a nosotros?